Cuidarse es una tarea constante, es decir, si tuviéramos que programar en nuestro calendario la tarea de cuidarnos, deberíamos de programarla todos y cada uno de los días del mes. No siempre de la misma forma, ya que no podemos tampoco estar todo el día pendientes de cuidarnos. Cuidarse tiene varias vertientes, por un lado está la vertiente física y por otro lado la vertiente psicológica. Esta última es muy importante, porque de ella depende de que tengamos ganas de cuidar nuestro físico, es bien sabido que una persona con baja energía tiende a relajarse en aspectos como la dieta o el ejercicio. De ahí la importancia de practicar técnicas como el mindfulness o la relajación.
Sigue leyendo