El auge de la medicina y la ciencia en todos los ámbitos de la vida han dejado relegados los remedios caseros tradicionales al ámbito de la superstición o considerarlos mucho menos eficaces frente a los fármacos. El tiempo y la propia investigación científica están dando la razón a muchos remedios y soluciones de tradición ancestral. Estos remedios caseros curativos presentan considerables ventajas frente a los medicamentos: al no contener químicos no tienen efectos secundarios nocivos para el organismo, nos son tan agresivos en su acción y además tienen otros aportes adicionales que benefician, además del motivo del tratamiento.
Ha quedado demostrada en sobradas ocasiones la eficacia del aceite de oliva en la salud y también como tratamiento de belleza, siendo evidente que comprar aceite de oliva no es solo un gasto destinado a la alimentación. La lista de remedios es tan extensa que aquí solo hemos recogido una selección de los más tradicionales y eficaces.
Remedios para la salud
Las infusiones de hojas de olivo son beneficiosas para la fiebre y la hipertensión. Para la fiebre es recomendable tomar tres tazas al día y para la hipertensión ante de comer y de cenar.
Para los cálculos en el riñón, la vejiga y el hígado el recomendable tomar en ayunas zumo de limón con una cucharada de aceite.
Un par de cucharadas de aceite de oliva crudo en ayunas actuará como laxante.
Los jabones hechos con aceite de oliva son buenos para las hemorroides y para limpiar las quemaduras. Para el estreñimiento y cualquier otro tipo de dolencias digestivas dan buenos resultados las cataplasmas de espinacas crudas machacadas con aceite de oliva y aplicadas sobre el vientre.
El aceite de oliva crudo es bueno para masajear los pies, actuando sobre los pies cansados y los sabañones.
Cuidado estético
Los masajes diarios con aceite de oliva eliminan y previenen la rosácea.
Los jabones de aceite de oliva son buenos para las pieles acneicas y para las pieles secas. Para estas últimas se puede fabricar una crema licuada al baño María mezclando dos cucharadas de lanolina licuada con otras dos de aceite de oliva.
Para el pelo castigado, aplicar una o dos nueces de aceite de oliva antes de lavarlo. Puede mantenerse durante 20 minutos o una hora para aumentar sus efectos. El cabello que da suave y sedoso.
Para el cuidado de las uñas basta sumergir los dedos durante cinco minutos en aceite una vez al día antes de dormir.