Dicen que cuidar de nuestra salud es lo mejor que podemos hacer en cualquier momento de nuestra vida, que esto es más importante que el dinero y que el amor. Desde luego, nosotros no somos quienes para tratar de rebatir al refranero español, pero desde luego sí que tenemos el derecho a decir algo al respecto: y es que hay muchas maneras de cuidar de nuestra salud. Solemos pensar que tener salud es sinónimo de cuidar de nuestro estado físico, pero lo cierto es que, en muchas ocasiones, el estado mental es más importante que el físico.
Desde luego, muchas personas nos podrían comentar algo al respecto a causa de que lo viven en primera persona, con algún familiar que presenta síntomas de Alzheimer, por poner un ejemplo de enfermedades que tienen que ver con la salud dental. De lo que no cabe la menor duda es de la importancia que tiene la mente en lo relativo al cuidado de nuestra salud. Y es que no nos podemos olvidar de ella a la hora de valorar este asunto. De lo contrario, estamos dejando de lado una de las claves para conseguir nuestra felicidad y disponer de todos los elementos posibles para salir del atolladero.
Los problemas mentales constituyen uno de los problemas más graves y comunes, por desgracia, en el interior de nuestras fronteras. Una noticia que fue publicada en la página web de La Vanguardia en mayo del año pasado informaba de que ya es medio millón de personas en España las que padece algún tipo de desorden mental. Y es que problemas como lo son el Alzheimer, del que ya hemos hablado, constituyen una verdadera amenaza para personas que han cumplido una determinada edad. En los hospitales nos pueden hablar de muchos de los detalles de este asunto.
Y es que una noticia que fue publicada en el diario 20 Minutos informaba de que estaban aumentando los ingresos hospitalarios por algún tipo de trastorno mental en nuestro país. Además, esta noticia apuntaba otro dato que es realmente importante y que define cómo está la situación en este sentido: el 25% de los españoles, uno de cada cuatro, ha padecido, padece en la actualidad o padecerá algún tipo de trastorno mental. Se trata de un dato que es suficiente como para asustarnos de una manera considerable. Muchas personas ya han manifestado su preocupación al respecto.
La psicología, la mejor herramienta para cuidarse
En España son muchas las personas que tienen algún tipo de problema mental y que necesitan los mejores cuidados para tratar de revertir esta situación. La psicología es, desde luego, una de las mejores herramientas para cuidarnos y permanecer saludables en este aspecto. Es algo que cada vez tiene más claro la población española en función de lo que nos han comentado desde Maribel Paz, una entidad dedicada precisamente a este tipo de cuidados y que se ha encontrado con algunos de los casos más difíciles de resolver en lo relativo a esta materia.
Un tratamiento profesional adecuado puede ser la diferencia entre la resolución de un problema de este estilo o no. Lo que tenemos que tener claro es que de un asunto como lo es este no podemos salir de la noche a la mañana. Por eso, la paciencia es otra de las grandes amigas que nos podemos echar para tratar de llevar de la mejor manera posible este viaje. Perderla es como tirar la toalla en lo que respecta a la resolución de este tipo de problemas y, por tanto, tenemos que tener bien claro que la desesperación no nos conduce a ningún buen puerto.
Los profesionales de este campo saben, como no podía ser de otra manera, que una situación como esta también la padecen los familiares. Es muy difícil sobreponerse a que un familiar no tenga la capacidad de reconocernos, como ocurre en muchos casos. Por eso es conveniente que los psicólogos no se olviden de ellos. Desde luego, no cabe la menor duda de que la familia es otro de los grandes destinos de todo tipo de ayudas en este sentido. Y es que tener a un ser querido ingresado en el hospital con algún tipo de desorden mental es realmente duro. Muy duro.
Por desgracia, este tipo de situaciones se van a seguir repitiendo en un futuro. No nos queda más remedio que concienciarnos. Por suerte, son muchas las personas que se encuentran en pleno proceso de formación para tratar este tipo de anomalías y las de los familiares de los pacientes. Porque nadie se merece estar solo en situaciones como las que venimos describiendo en este artículo. Y porque los problemas mentales también tienen mucho que ver, si no todo, con nuestra salud. Una salud que no depende en exclusiva de nuestro estado físico. Para cuidarnos, el cuerpo sano debe estar gobernado por una mente sana.